Editorial: Destino, 2016
Colección: Áncora & Delfín
288 páginas
17,50 €
Ebook: 8,99 €
Argumento:
Marc está obsesionado por averiguar quién asesinó a su madre
siete años atrás.
Comentario:
«El carbonero», relatada en primera persona por su
protagonista, se divide en tres partes bien definidas: la presentación de los
principales personajes y sus circunstancias, la venganza de Marc y las
consecuencias de esta.
La primera parte hace especial hincapié en relatar el modo de
vida de los carboneros, detallando los diferentes pasos del proceso, la dureza
y dificultades a las que se enfrentan, lo que parece conferirle cierta
importancia, al menos hasta ver que se diluye hasta desaparecer en las siguientes
etapas de la obra, relativizando su importancia.
En estas páginas se define también al pequeño elenco de
personajes, siempre vistos a través de la mirada subjetiva de Marc, en base a
lo que siente o piensa de los demás, desde la atracción por dos mujeres tan
diferentes como Aina y Joana, a la relación con un progenitor silencioso,
inmerso en su mundo interior, un espectro de sí mismo tras la tragedia.
Una revelación de Joana (a saber por qué no la ha hecho
antes) lleva a Marc a averiguar, sin la menor dificultad y, por tanto, sin
misterio ni intriga, quién asesinó a su madre, y a iniciar la venganza que
protagoniza la parte central de la novela, con un protagonista convertido de
pronto en asesino implacable, violento, muy distinto al joven sensible y
protector que se había mostrado en las páginas anteriores.
Este repentino cambio, tanto en el tono como en la
personalidad de Marc llama más la atención al sumarse a la aparición de los villanos, en
especial uno de ellos, Ganxo, con quien mantiene una conversación compuesta por
ingeniosos intercambios de frases, chulerías, etc, en un tono que, por
momentos, llega a resultar exagerado, paródico, poco creíble.
La conclusión, que incluye las consecuencias de la venganza, parece
tan controlada por Marc como todo lo anterior, erigiéndose tanto en vengador
como justiciero en un final un tanto confuso en el que se echa en falta algo, quizá
una mayor definición en algunos temas.
En resumen, «El carbonero» es una novela desigual, relatada por
un protagonista que maneja un vocabulario más amplio y complejo del que sería
razonable esperar en sus circunstancias, que no parece encontrar el equilibrio
en forma ni en fondo (la importancia decreciente de la profesión, la ausencia
de misterio, cómo se dosifica la información…), que gustará, o no, según las
expectativas que se tengan.
***T***
¿Qué te ha parecido la reseña? ¿Te apetece leer
este libro? ¿Ya lo has leído? (Los comentarios están moderados con lo cual
tardan un poco en salir. Gracias por tu opinión)
Pues lo he empezado pero explica todo el proceso del carbón y me está aburriendo hasta el infinito... Y no sé. Le falta como cuerpo a la narración. Creo que lo voy a aparcar
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